lunes, 30 de julio de 2012

Por el ojete



Varios son ya los que por estos lares se han ido despidiendo porque les llegó su momento vacacional. Y ahora me ha tocado a mí. En realidad, no era mi momento pero al final por circunstancias me marcharé 24 horas antes de lo previsto. Cuando lo haga, como siempre que me ausento, todos los comentarios quedarán en fase de moderación hasta que regrese ya que donde voy estaré desconectada.

No diré aquello de que sean mis vacaciones merecidas, que me las merezco. De hecho, creo que me las merezco mejores aún. Algún día me gustaría pasar unas vacaciones, por ejemplo, encerrada en una habitación con un maromo que sólo me deje salir de ella para cubrir mis necesidades básicas, o para ir a comprar tabaco! Jajaja. Siempre daré más importancia en mis vacaciones a la compañía que tenga que al lugar de destino donde vaya.

En cualquier caso sí que me merezco desaparecer unos días. En los últimos tiempos, sobre todo en los últimos meses, en mi empresa nos han dado a base de bien por el ojete. Y se preveen tiempos aún peores. Personalmente, creo que no cambiará hasta que no cambie algo drásticamente, por ejemplo, la panda de ineptos, corruptos y mamones que tenemos por dirigentes políticos. No, no me quiero encender, no quiero hablar de política, al menos no aquí.

Aquí, si me enciendo, ya sabéis que es de otra manera.

Disfrutad mucho, cuanto podáis o cuanto os dejen. Sed malos, sin dañar a nadie. Follar cuanto podáis, nunca se sabe cuándo puede sobrevenir una época de crisis, y ahora no hablo de la político-económica.
Espero que sigáis por aquí a mi vuelta. No es lo mismo calentarse sola que hacerlo en vuestra compañía.

Besos.

sábado, 28 de julio de 2012

Migajas de placer



Ya apenas mantenían relaciones, dormían en habitaciones separadas y el contacto físico entre ellos era nulo.
Ella se cansó de esperar unos besos y unas caricias que nunca llegaban, y cuando lo hacían, eran a pequeñas dosis… sólo cuando él quería, ella recibía migajas de placer. Y un día, ella dejó de esperarlas y al final llegó a detestarlas.

Poco antes de esto, casi accidentalmente, una noche se metieron juntos en la misma cama. Cada uno dándole la espalda al otro, como era habitual. Cuando ella empezaba a conciliar el sueño, él empezó a acariciarla, primero los hombros, la barriga, luego sus pechos, y finalmente metió su mano por dentro de las braguitas de ella empezando a acariciar con mucha suavidad todo su sexo.
Ella dio un respingo, pues no esperaba aquello desde hacía mucho tiempo. No sabía cómo reaccionar y de entrada pensó en abandonarse, en no ofrecer ninguna reacción, ninguna resistencia pero ninguna condescendencia tampoco.
Él interpretó aquello como un paso para seguir adelante, así es que se desnudó y luego la desnudó a ella. Ella, como una muñeca de trapo, simplemente permanecía dejándose llevar.



Él empezó a masajear sus pechos, abarcándolos con sus manos. Y luego se recreó en jugar con su lengua en sus pezones. Ella se sorprendió a sí misma descubriendo que no sentía nada.
Tumbado a su lado, él empezó a acariciar muy hábilmente su coño. Después de  tanto tiempo, él había logrado aprender –o ella enseñarle- cómo le gustaba y hasta ese día él aún era quien mejor la masturbaba. Ella empezó entonces a bajar un poco sus barreras y se abrió de piernas, invitándole a él y a sus hábiles dedos a que siguiera jugando.
A pesar de lo bien que él lo hacía, ella no lograba humedecerse y mucho menos estremecerse de placer. Empezó a hacerlo cuando él se centró en su clítoris y cuando ella, cerrando los ojos, imaginaba que era otra persona quién estaba provocándole aquel placer, cuando eran otras manos las que empezaban a volverla loca, cuando era otra voz….. No oyó su voz hasta el momento en que él le susurró al oído “¿No te das cuenta cómo me pones”?.

No, no quería darse cuenta. Quería tener otras manos jugando con su intimidad. Aún así, el deseo iba creciendo y ella decidió abandonarse. Mientras él presionaba y aflojaba su clítoris, ella notó en su muslo la fuerte erección que tenía su compañero. Ella se giró, buscando en su mirada una respuesta a cómo acabaría aquello, cuando había tanto deseo acumulado y ella ya lo enfocaba hacia otra parte. El simple roce de su pierna con su pene, hizo que él se corriese, y ella notó la humedad de su explosión recorrerle toda la pierna.
Ella le miró y le preguntó, cómo era posible. Él le dijo que estaba fuera de sí, que pocas veces en su vida se había corrido como en aquella ocasión, sin que nadie le tocase, sin apenas ningún contacto sobre él.
Ella se levantó para limpiarse y volvió a su cama. Aquella fue la última vez que el semen de él tocaba alguna parte de su cuerpo. Quizás fue la última migaja de placer.





jueves, 26 de julio de 2012

Querida amiga




Querida amiga,

¿Alguna vez cuando has acabado de follar con tu chico y él se queda dormido te has preguntado por qué?

Peor aún: quizás has pensado que tú debiste ser más colaboradora, moverte un pelín más, ya que él hizo casi todo el esfuerzo y por eso ha acabado reventado.

O quizás hayas pensado, si fuiste tú quien dirigiendo el cotarro desde arriba, le diste demasiada caña al pobrecito, después de todo tú eres una fiera del sexo y él un hombre.

Es posible que te hayas preguntado también alguna vez por qué, al cabo de muy pocos minutos de correros ambos, él se siente pleno y satisfecho y se suele dormir, y tú vuelves a estar encendida, con ganas de más,

quieres más aún. Quizás no has podido controlar tu deseo y te has masturbado mientras él dormía, sintiéndote a veces un pelín guarrilla, otras una ninfómana, y otras….

Parece ser que sí que hay algo de cierto en que los hombres tengan el cerebro en la polla: he aquí una explicación científicamente comprobada y bastante aceptable.

Moraleja: Para curar el insomnio no hay nada mejor que una buena pajilla.





martes, 24 de julio de 2012

A ciegas pero no tanto: inicio



Las citas a ciegas…. Ese asunto tan atrayente, misterioso para algunos, odioso para otros, indispensable para unos, impensable para otros….
Yo no he tenido muchas citas a ciegas, pero con las que he tenido y las que he vivido de cerca de algunos conocidos-as me siento, sino capacitada, sí con el ánimo de hablar de ello. Así es que a partir de hoy declaro inaugurada la nueva sección “A ciegas pero no tanto”.
No tengo la verdad absoluta en nada, y en este tema menos. Por tanto, si alguien me contradice, me corrige, o me ratifica será un honor. Que no me voy a creer yo que nadie que se mueva por este medio no haya tenido al menos… una.

Se supone que una cita a ciegas es un encuentro entre dos personas, que no se conocen personalmente. Porque éste es un quid importante de la cuestión: ¿ha de ser completamente a ciegas y no conocerse nada de nada, o puede haber habido cierto contacto a través de correos, chats, whatsapps y demás?
¿Se puede considerar “a ciegas” si ya se ha visto algo, una fotografía por ejemplo?
Personalmente, opino que sí. No dejan de ser dos personas que nunca han estado una delante de la otra, nunca se han tocado, ni mirado a los ojos, ni hablado cara a cara.
En cuanto a que sea un total desconocido, yo no lo recomiendo en absoluto. Primero, porque nunca sabes lo que te puedes encontrar y hay mucha gente rara por el mundo. Te la puede pegar alguien a quien creas que conoces un poco, pero imagina a quien no conoces de nada en absoluto.

En cuanto a la imagen…. Es un riesgo, pero todo depende de lo que esperes encontrar y lo que esperes de esa cita.
Si lo que esperas es poder tener sexo en ella y admites que no podrías tenerlo con cualquiera que no te atraiga, es mejor haberse visto antes.
Si lo que esperas es pasar un rato agradable y si surge algo pues que surja, no tiene tanta importancia haberse visto o no antes.
Yo he vivido las dos experiencias. En una ocasión estuve a punto de quedar con un chico con el que llevaba un tiempo hablando. A mí ya me parecía más salido de lo común, pero también vi que era fácil cortarle. A punto de nuestra cita, me enseñó una fotografía suya, de su rostro. Y no pude. Y no es porque no fuera atractivo, que ni sí ni no; es que su cara me pareció la de un sádico, así sin más.
Y también he quedado con alguna persona a la que no había visto en mi vida. He tenido suerte y en esas ocasiones la experiencia fue muy grata.

Básicamente, e imperando sobre el atractivo físico o no de una persona, creo que es indispensable que haya feelling amistoso, o emocional, o buen rollo. El encuentro será agradable; garantizado, aunque no haya atracción física.
Por tanto, primera conclusión: yo recomendaría a ciegas, pero no tanto. Pero que cada cual escoja la opción que más le convenga….y luego me lo cuente.



domingo, 22 de julio de 2012

Aperitivo



Decidí darle una sorpresa e ir a verle. Después de tantos contactos virtuales, yo necesitaba ya uno real. Y él también, sólo que él parecía más paciente que yo.
Pero era algo difícil de organizar y además no quería que él lo supiese hasta que estuviese allí, y que fuese una sorpresa. Por otra parte, tenía que asegurarme de que si recorría cientos de kilómetros, él estaría allí aquella noche.
Era un jueves por la noche y estábamos hablando. Le pregunté qué pensaba hacer el viernes por la noche y me dijo que, si no quedaba con algún amigo para ir a tomar una copa, estaría allí, conmigo, como siempre. Le dije que yo no iba a estar, que tenía planes. Pareció algo frustrado pero era lo que había.
El viernes de madrugada, antes de salir mi viaje hacia su ciudad, hacia él, le mandé un correo electrónico:

“Cariño, ni te imaginas la de cosas que se pueden gestionar por internet. Como queda muy poco para tu cumpleaños, te he preparado un regalo, una sorpresa. Tendrás que seguir todas mis instrucciones y confiar ciegamente en mí. ¿Lo harás? Sí, sé que lo harás.
Mira: esta tarde, hacia las ocho, quiero que vayas al Hotel…., que está en la ciudad…., un poco más importante que tu pueblo, a unos 30 kms. Cuando entres, te diriges al pub del hotel, pides una copa y le dices al barman que eres amigo de Belkis. Él tiene instrucciones y sólo con eso sabrá qué tiene que hacer, entre otras cosas, no cobrarte lo que consumas. Siéntate en uno de los sillones, toma tu copa tranquilamente, escucha música, relájate, toma otra copa si te apetece…. Cuando acabes te vuelves a dirigir al camarero. Él te entregará la llave de una habitación del mismo hotel.
Sube a la habitación. Date una ducha, despacio. En la habitación hay aire acondicionado, televisor, hilo musical, nevera con algunos refrigerios y bebidas….. siéntete cómodo. Y alrededor de las nueve y media de la noche, el servicio de habitaciones te servirá una deliciosa cena.
Espero que, como siempre, confíes en mí y sigas todos los detalles”.

A las nueve y media, puntual como un reloj, llamé con los nudillos a la puerta. Él me abrió. Siguió el plan y acababa de ducharse, pues sólo tenía una toalla envuelta alrededor de su cintura y el cabello aún mojado. Me miró, y parpadeó infinidad de veces. No me esperaba allí.
Me abracé a él, le besé, una y otra vez, y pasé a la habitación cerrando la puerta tras de nosotros.
Me desnudé rápidamente y le quité la toalla que llevaba a la cintura y le pedí que se tumbara en la cama.

Tumbado él boca arriba, puse mis rodillas sobre la almohada y me abrí de piernas delante de su cara. “Te dije que te servirían la cena, cariño”. Y él empezó a jugar con su lengua dentro de mí, muy suave y tímidamente al principio. Yo llevaba tanto tiempo deseando aquello, y al final llegando a comprobar que sería algo extraordinario, que no tardé nada en absoluto en empezar a humedecerme.
Él jugaba hábilmente con su lengua dentro de mí, sin dejar ni un solo punto por recorrer, y centrándose en aquellos en que mi placer aumentaba. Poco a poco, empecé a notar que no tardaría en correrme, que quería más, y más inconsciente que conscientemente fui yo quien empezó a moverse sobre su boca, sobre su cara…. Yo marcaba con mis caderas el ritmo que quería, la presión que quería, mientras él con su lengua intentaba acompañarme, y a veces me dejaba caer sobre su cara, sintiendo oleadas de placer cuando su nariz presionaba fuertemente mi clítoris.
Una vez me hube corrido como una loca, mientras recuperaba el aliento, pellizqué mis pezones para centrar mi energía en otra parte, durante unos segundos. Pero era imposible…yo aún quería más. En la misma posición, con mis rodillas sobre la almohada, me giré dándole la espalda, y me coloqué sobre él.

Empecé a acariciar su pene con mi lengua, mientras abría más mis piernas invitándole a que continuase con lo mismo que había estado haciendo antes. Lamía su polla muy suave, despacio, de arriba abajo, intentando no dejar ningún pequeño trocito de piel por saborear.
Poco a poco, empecé a lamer y a meterla en mi boca con más avidez, a medida que iba creciendo el placer que él me provocaba. En algún momento tuve que hacer algún esfuerzo por no dañarle…momento en el que entendí por qué muchas personas prefieren el sexo oral por separado y no simultáneamente. Pero en ese instante yo necesitaba sentirte y hacerte sentir, a la vez.
Llegué al máximo del placer segundos antes que él, y fui capaz de correrme sin dejar de acelerar el ritmo de mi boca con su polla dentro de ella.
Él estalló en toda mi cara. Me giré de nuevo y le besé…mezcla deliciosa de fluidos y sabores.
Entonces le dije que nos diésemos una ducha, que saliésemos a cenar “de verdad” y que luego volveríamos a la habitación ya que aquello había sido sólo un aperitivo.


Dedicado con todo mi cariño y todo mi deseo a.....jo! y cómo digo a quién? Bueno.... pues se lo dedico a alguien con quien estoy hablando en estos precisos instantes....justo antes de darle a Publicar

sábado, 21 de julio de 2012

Dicen las estadísticas



Un 10% de los hombres han hecho el amor una vez por lo menos en el ascensor, escaleras o en la calle.

Un 20% de las mujeres quisieran ser hombres.

Un 35% de los niños están enamorados de su profesora.

A un 45% de las mujeres les gustan los tíos con los ojos azules.

Un 46% de las mujeres practican el sexo anal con su pareja.

Un 50% de los hombres se acuestan sin lavarse los dientes.

Un 65% de las mujeres prefiere hacer el amor por la mañana.

Un 90% de los hombres afirma que nunca han pensado tener relaciones homosexuales.

Un 90% de las mujeres querría hacer el amor en la naturaleza. 

Un 99% de las mujeres nunca ha hecho el amor en la oficina.

Conclusión de la estadística
Hay más probabilidades de tener sexo anal con una mujer en el bosque por la mañana sin haberse lavado los dientes la noche anterior que follar por la tarde en la oficina.

Moraleja:
No te quedes hasta tarde en el trabajo. ¡No sirve absolutamente para nada!



Personalmente no soporto a los hombres que anteponen el trabajo al sexo, bien porque acaben muy cansados, siempre tan cansados que un polvo les representa un esfuerzo enorme o bien porque pongan siempre como excusa su trabajo y la falta de tiempo que les provoca, incluso para el sexo.
¡Cuántos polvos no me he perdido yo por algún gilipollas así!

miércoles, 18 de julio de 2012

Otra vez...agradecida



Resulta que el amigo Signum (dueño del blog http://palabradesedano.blogspot.com.es ) me ha concedido este premio. Lo acepto de sumo agrado, pues no es habitual que te los concedan y menos quien apenas te conoce. Aceptarlo representa contestar a unas preguntas y nominar, en este caso a 12, a otros bloggers para que contesten a las mismas preguntas y así sucesivamente.
Personalmente, sólo hay una cosa que no me gusta de este tipo de premios: y es que al nominar, tienes que dejar a algunos fuera. Por tanto, yo nominaré no a los mejores (o puede que sí, que lo sean) sino a aquellos que creo que quizás acepten seguir la rueda de la respuesta de preguntas. Después de todo, sirve para conocernos un poco más si cabe, y yo suelo contestar a casi todas las preguntas excepto a cuál es mi talla de pecho (no me lo preguntéis nunca! Jajaja).

Pues ahí van preguntas y respuestas:

1     1- ¿Te gustan los deportes? Sólo algunos, y más verlos por la tele que practicarlos…no tengo demasiado tiempo libre. En cualquier caso, me gustan más los deportistas que los deportes.
    
2    2-  ¿Cual es tu hobby? Por la falta de tiempo libre no tengo demasiados, pero mencionaré el que comparto aquí con vosotros: intentar mantener vivo y ardente este blog.
3
3    3- ¿De que color son tus ojos? Marrones, Por alguna razón (creo que genéticamente maternal) se vuelven verdosos cuando lloro o cuando les da demasiado el sol
4   
4    4- ¿Cómo es tu cabello? Castaño con mechas rubias, pero todo es teñido. Es lo único falso que tengo. En realidad, soy morena, morena. Y ya sabéis lo que dice el dicho sobre las rubias: no, que son tontas no!!!! Eso es mentira. El dicho dice: “rubia de bote, chocho morenote”:
5 
5     5-  ¿Eres zurda o diestra? Soy diestra, casi todo me sale mejor con la derecha, aunque hay cosas que sé hacer perfectamente igual con las dos manos, como por ejemplo acariciar.

6     6- ¿Tienes muchos secretos? No, no demasiados. Pero prefiero que los descubras a revelarlos.
7
-        7- ¿Que nombre le pondrías a tu hijo? Me gustan los nombres cortos, difícilmente abreviables. Y no me gustaría ponerle el nombre de su padre.
8
-       8- ¿Quisieras besar apasionadamente a alguien? Sí, por supuesto, ese deseo nunca se pierde.
9
      9- ¿Te arrepientes de algo? Dicen que no es bueno arrepentirse, sino aprender de los errores. Yo lo intento, pero sí, hay algunas cosas de las que me arrepiento y una de ellas es no hacer más caso al corazón que a la cabeza.
1
       10- ¿Tocas instrumentos musicales? Tocaba la flauta cuando era niña. Ahora….pues también :)
1
-    11- ¿Tu película favorita? Uys, muchas, depende del momento y de la compañía, pero me gusta destacar como preferidas las de terror psicológico.
1
1   12- ¿Extrañas mucho a alguien? Afortunadamente, tengo muy presentes a las personas que son más importantes en mi vida. A pesar de eso, sí, extraño a alguien… a los que se fueron, y no al otro barrio, no.

Y mis nominados:
2.    Ssshhh
3.    Adis
4.    Gregori Samsa
5.    Joan Gasull
6.    Goriot
7.    Guille
8.    Devastiel
9.    Toy
10. El Patán

Mencionaría a algunos más, pero éstos son los únicos susceptibles a mi entender de apuntarse a la rueda.
Me encantaría saber de qué color tiene los ojos, por ejemplo Julio, y a qué dedica su tiempo libre. Creo que no tiene blog donde enlazar esta propuesta pero puedes venir y decírmelo, verdad?

martes, 17 de julio de 2012

Las camisetas son para el verano



Mucho se habla aquí y allá de que si una mujer quiere follar, se folla, que ella es quien tiene la última palabra, porque claro, el hombre siempre está dispuesto, por él no hay problema. Y también que si no hay que ser un bellezón ni un tipo cachas, porque pillar cacho pilla cualquiera.
No sé, supongo que cada uno interpretará la película según le vaya. Pero yo no podría estar en más desacuerdo.
Algo falla en las señales que emito: quizás mi escote no es lo suficientemente generoso, quizás no es del todo sensual mi cruce de piernas, quizás cuando me humedezco los labios porque un tipo me atrae se piensa que es que los tengo resecos, quizás sostener la mirada es algo que acobarde,….no sé. También es posible que fallen vuestros receptores de señales, chicos.
El caso es que una tiene ganas pero quizás lo del cortejo no se me dé demasiado bien. El otro día hablaba de esto con mi amiga Ssshhh, y yo le decía que al final sólo me quedaba pintarme un letrero en la frente que diga: “Quiero follar”, pero claro, me tomarían por loca?
Entonces me acordé de aquella ocasión en que me disfracé de bebé, con mis pololos, mi chupete,…no me faltaba ningún detalle. La gente conocida con la que me iba encontrando me decía que iba muy mona y me daba dos besos. Yo suponía que era por la ternura que despertaba mi disfraz hasta que me besó alguien que no me esperaba (un superior en mi empresa), me quedé algo parada y me dijo que era lo que ponía mi babero: “kiss me” llevaba impreso.
Así es que le digo a mi amiga que me voy a hacer estampar una camiseta con alguna frase que invite a algún tipo a acercarse con intenciones….serias? Noooo. Bueno, el sexo hay que tomárselo en serio, pero ya está.





Y le digo a Ssshhh: “¿Qué te parece si me pinto en la camiseta: Yo follo…y tú?”
Y ella, inteligentemente, me hace caer en la cuenta de que esa frase encierra cierto aire de superioridad, de ir sobrada vamos. No, esa no me convenía.
Ella me sugirió: “¿”qué tal si pones: Follamos?”. Suena más como a una invitación, el que quiera bien y el que no pues pasando.
Pero yo pretendía algo más impactante, algo que no dejase lugar a dudas y no me conformaba con una invitación que siempre puede ser rechazada.
Así es que pensé este otro enunciado: “¿Me follas o te follo?”.
Sí, creo que este me gusta. Con éste queda claro que voy a por ti, o empiezas tú o empiezo yo, pero los dos sabemos cómo vamos a acabar.
El verano es un buen tiempo para lucir camisetas, de todo tipo. Voy a ver si me la confeccionan para mediados de agosto en que asistiré a una fiesta de camisetas mojadas. Si cuela, cuela y si no…a la lavadora y punto.


viernes, 13 de julio de 2012

¡Las bragas al suelo!



¡Se me cayeron las bragas al suelo!

Hace tanto tiempo que utilizo esta expresión que creo que es de las primeras que adquirí en mi vida. Y durante mucho tiempo, creo que yo era la única persona de mi entorno (compañeras de clase, amigos de la pandilla,…) que la utilizaba hasta el punto de que llegué a pensar que la había inventado yo.
Pero no, no era así. Esa expresión ya existía, tiene un significado y además un origen (fácilmente localizable buceando un poco).

La cuestión es que se aplica cuando se recibe una impresión o una sorpresa demasiado fuerte. Puede ser agradable o desagradable, pero en cualquier caso inesperada.
Cuando la sorpresa o impacto que recibo es muy, muy grande y muy, muy inesperada, yo digo que “se me cayó el chocho al suelo”, y ésta sí que la he oído pocas veces salvo en mis propios labios.

A nivel internauta y a nivel de salida, se me han caído las bragas al suelo muchas veces. Claro, a este nivel, la sorpresa sólo puede venir en forma de palabras, como cuando aquel me dijo “te voy a comer el coño tres veces” o a nivel de imagen, como cuando he recibido una foto cedida para el blog. Luego fue el chocho quien acabó estrellado contra el suelo cuando el destino hizo que pudiese ver una de ésas fotos en vivo y en directo, observando que no hubo photoshop ni cualquier otro truco en la fotografía.

Se me cayeron las bragas e inmediatamente después el chocho cuando alguien me digo “eres mi diosa y mi orgasmo será mi ofrenda”. No me considero diosa de nadie ni por asomo pero si hay que recibir ofrendas así, pues se reciben. El autor de estas palabras hace que se me caigan las bragas  -y a veces el chocho- al suelo continuamente. Es mi ciber-amante!  Consultaré con mi conciencia si quiero hablar de él. Bueno…igual también le pregunto a él.


jueves, 12 de julio de 2012

Reencarnación


El matrimonio había llegado a un acuerdo: quién muriera primero volvería a informar al otro de la otra vida, pues no sabían si existía la reencarnación. Su mayor temor era que no existiera nada después de la muerte ...
Después de una larga vida juntos, el marido fue el primero en morir, y, fiel a la palabra dada, cumplió con lo acordado en vida.

-Maria, Maria ...
-¿Eres tú, Manolo?
-Sí, he vuelto y, tal como dijimos, te cuento. Esto es maravilloso ...
-¿Y qué haces ... ? ¿Qué se siente...?
-Me levanto por la mañana y nada más levantarme echo varios polvos. Tomo el desayuno y voy al campo de golf. Después hago la siesta a la sombra -el sol aquí calienta demasiado-, y después de de la siesta follo un par de veces más.
A continuación tomo un almuerzo con el que disfrutarías, pues solamente como verduras. Un rato más tarde vuelvo al campo de golf y el resto de la tarde continuo follando. Cena, y vuelvo al campo de golf a seguir hinchándome de follar, y cambiando de hembra cuando quiero, y así hasta altas horas de la noche. Luego a dormir y al día siguiente se comienza de nuevo ....
-¡Oh Manolo ... estás en el Cielo!
-No, Maria, no ... estoy en Tomelloso y ahora soy un conejo ...


lunes, 9 de julio de 2012

La hipoteca, una deuda a saldar


Otro relato de El Perfumista




La  hipoteca era sin duda una deuda a saldar y Dolores lo sabía bien tras la visita a su banco. Se había atrasado en el pago de su hipoteca y sino remendaba su situación el banco iba a embargarla . El director del banco resultó amable como siempre pero inflexible y duro en sus exigencias . 

Dolores era guapa con un cuerpo serrano y unas peras dulces en almíbar  que a sus 24 años de edad estaban en su punto preciso de maduración. El director, Pedro, la deseaba si bien no quería mezclar trabajo con placer ni que eso le hiciera ceder ante sus obligaciones de director . 
Leyendo los anuncios del periódico on line, en su sección de clasificados, encontró un anuncio con un teléfono que decía " joven no profesional en situación de apuro económico busca conocer hombre para sexo, previa remuneración ".
Por curiosidad llamó y al oir la voz reconoció a Dolore. Si bien a ella su voz le resultaba conocida, no llegó a reconocerle . Le dió su dirección y le explicó lo que incluía y el precio . 

Al llegar a la casa de Dolores, Pedro tocó el timbre no sin antes camuflar su aspecto con un sombrero y unas gafas de sol y ladearse un poco para no ser tan reconocible por el "ojo" de la puerta . Ella no lo reconoció , abrió la puerta y Pedro le dijo : "Te tenía ganas. Dolores no te preocupes, seré discreto y tal como te prometí te he conseguido financiación para tu hipoteca"
Dolores al principio sintió miedo y vergüenza pero en el fondo le daba morbo la situación . Ella le estaba jodiendo con la hipoteca y ahora Pedro la jodía bien a gusto . El morbo de tirarse a tu jefe , a un político o al director de su banco ( Pedro ) le daba mucho morbo.

 El la empujó sobre la mesa, la desnudó con pasión y le arrancó el tanga negro con un mordisco para posteriormente penetrarla  . Ella gemía fuerte y se humedecía mucho ( siempre lubricaba mucho ) y ambos se corrieron al mismo tiempo y la habitación olia a sexo, a coño perfumado y a leche entera. 
Esa sincronización no era casual, habia química entre ambos y a pesar de que fuera de ese nidillo de pasión ambos eran rivales , la cama los unía, creaba una hermandad, un vínculo entre ambos. En la pasión no hay fronteras que les separase.

Al final tras, dos semanas de encuentros remunerados, pudo Dolores ponerse al día en su hipoteca y la apuesta por Dolores que hizo Pedro en el banco fue arriesgada y sin apoyo alguno, jugándose su puesto de trabajo, fue exitosa y llegó a buen fin . 
Al fin y al cabo una hipoteca es una deuda a saldar y de puta a puta va 0 : tanto Pedro como Dolores ambos joden por dinero si bien en esferas distintasm y Dolores dando placer.
¿Acaso no os prostituiríais para salvar el piso de los bancos en un momento de crisis ?



sábado, 7 de julio de 2012

Con sabor a añejo


Un día curioseando por ahí, me encontré con esta imagen. Y me encantó, sin saber definir a ciencia cierta el por qué. Esa criada, sirvienta, empleada del hogar, tan sexy...con ese cuerpo que hoy algunos llamarían rellenita y sin embargo yo veo con unas curvas maravillosas y bien definidas. Es lo que hoy llamamos pornochacha.
La fotografía se titulaba vintage. Y quise saber qué era eso o lo que significaba. Así es que indagué un pelín más y descubrí lo que era.
Si leéis un poquito, veréis que el vintage es una moda que se aplica a cualquier cosa, básicamente a la moda en el vestir, pero es aplicable a casi todo, y a muchas artes, y la fotografía no iba a ser menos.
Y ahí es donde me centré un poco: en imágenes sensuales o eróticas tipo vintage.
He hecho una pequeña selección de imágenes para mostrarlas aquí, para guardármelas en el blog, y algún día indagaré más. Desgraciadamente, hay muy pocas imágenes de este tipo (o al menos yo no las he sabido encontrar) con desnudos masculinos.


Existen (y deben existir) imágenes de desnudos, imágenes que identifican el lesbianismo, la masturbación, la penetración, algo de bdsm,... en fin, el sexo está inventado desde el inicio de los tiempos.
Quizás con el tiempo hayamos aprendido a ser más liberales en cuanto a mostrarnos, a enseñar, a aceptar,...pero el sexo y sus formas y variantes siempre debieron existir desde que el hombre y la mujer fueron descubriendo todas las posibilidades de sus cuerpos, juntos o por separado.




martes, 3 de julio de 2012

Recortable



Hace un rato veía un programa de televisión en el que preguntaban a gente anónima si habían disfrutado del orgasmo de su vida. Algunos contestaron que sí, y otros que no, que esperaban aún el mejor.
Yo soy del segundo grupo. Aunque creo que no están mal los orgasmos que he vivido (incluso los que he fingido, jajaja) y que a mí me parecen escasos en cuanto a cantidad, creo que el Orgasmo, con mayúsculas, aún está por sobrevenirme.

Ya comenté en una ocasión que siento una especie de orgasmito cada vez que alguien deja aquí sus palabras (y hay veces que más que palabras son sensaciones) y una especie de orgasmo cada vez que alguien se apunta al carro y se hace seguidor.
La verdad es que este era un rincón para mí, pero dejé la puerta abierta, y me encantó que hayáis ido entrando. Es como tirarte una vida masturbándote, sintiendo placer en solitario, y de pronto percibir que puedes sentir el mismo o más placer si te masturbas y alguien te está mirando. Y tanto placer me ha llevado en ocasiones a “masturbarme” para los demás, en vez de por y para mí misma.

Dicho esto, y llegados a los 100 seguidores (algo jamás sospechado ni esperado) hay premio para el seguidor número 100:

 
Si no me equivoco, el premio es para el Sr. Fístula Bloguera. Puede recoger su premio.

Qué leches! El premio es recortable, así es que… vales para todos!

domingo, 1 de julio de 2012

Visita inesperada




  
 
Él no acostumbraba a venir al trabajo a buscarme, pero ese día lo hizo. Llegó, me dio un beso, me preguntó si me quedaba mucho y le dije que no, que se sentase en una silla del despacho y esperase unos minutos mientras acababa un par de cosas.
Me miraba y sonreía, con esa sonrisa suya que casi siempre acababa de la misma manera, follando como locos. Así es que procuraba no mirarle, para no excitarme; no era el momento ni el lugar.
Se levantó, agarró el respaldo de mi silla (con ruedas, típica de oficina) y me separó de la mesa. Se agachó dentro del hueco y volvió a correr la silla, conmigo encima hacia la mesa.
Le increpé, le dije que estaba loco, pero él se limitó a mandarme callar y me quitó las bragas. Ese día llevaba un vestido, la tarea sería más fácil.
Empezó a acariciar mi coño, suavemente, con sus dedos. Di un pequeño respingo cuando empezó a acariciármelo con su lengua, magistralmente. Quería que parase, podría aparece alguien, pero a la vez no quería que parase nunca. Las primeras oleadas de placer no tardaron en venir, y yo abría más mis piernas, invitándole a continuar, a la vez que intentaba disimular más. Sonó el teléfono y contesté prácticamente como pude, casi con monosílabos: “Sí?.....No, ahora no puedo….Lo haré mañana”.
Colgué, y él seguía jugando con su lengua, mordisqueando mi clítoris, introduciendo sus dedos…me estaba volviendo loca. Volvió a sonar el teléfono, y puse el manos-libres para contestar, porque estaba usando mis manos cogiendo su cabeza, apretándola más si aún se podía contra mi coño. Recuerdo que pensé en una planta carnívora, como si mi coño lo fuese y quisiese absorber totalmente hacia adentro su rostro, aquel trozo magnífico de carne que era su lengua. Volví a contestar con un par de sílabas y conecté el contestador automático. Tuve que sujetarme a la mesa para no caerme de la silla cuando al fin alcancé el mejor de los orgasmos que hubiese vivido nunca aquel despacho.
Me incorporé, él salió de debajo de la mesa, guardé mis bragas en un cajón y le cogí de la mano para llevármelo al baño. Allí le besé profundamente y durante unos segundos, pensé en empujarle hacia atrás, haciéndole sentar en la taza del wc y allí mismo cabalgarle, follármelo. Pero finalmente me arrodillé en el suelo, desabroché su bragueta y le bajé los pantalones. Chupé unos segundos su polla, por encima del slip.
Bajé su ropa interior y empecé a lamer aquella esplendorosa polla, de arriba a abajo,  saboreando el glande, luego entera en mi boca, y luego decidí centrarme en sus testículos. Primero los lamí, y luego succioné primero uno y luego el otro, con esa justa presión que a él tanto le gustaba, mientras le pajeaba con mis manos.

Imagen cedida por un excitante lector anónimo


Creí que su polla no podría estar aún más dura, pero me equivoqué. Empecé a comérmela con más lujuria, introduciéndola todo lo hondamente que mi boca me permite, mientras se la pajeaba con mi mano. Me incliné y me puse de cuclillas, empezando a masturbarme con la mano que me quedaba libre. Los jugos en mi boca y sus gemidos empezaron a oírse fuertemente en el baño, y esperábamos que no entrase nadie, pero ya era igual….a mí nada me haría ya parar. Ahora no.
Me dijo entre gemidos que iba a correrse. Yo no paraba, ni le soltaba, ni sacaba su vigorosa polla de mi boca. Me limité a decirle con la mirada, que lo hiciese, que explotase, que acabase. Y él, adorablemente obediente, así lo hizo. Pero no paré aún de chupársela, seguí unos segundos más, y su líquido se me escapó por la comisura de los labios. Acabé corriéndome yo también, unos segundos después, y con el mismo dedo que me masturbé, recogí lo que escapó de mi boca….delicioso!