Mi vecina Paca es un poco cotilla. Siempre que me encuentra en el rellano, se pone a charlar conmigo de lo que sea, a veces invadiendo un poco mi intimidad y a veces desnudando sin tapujos la suya.
No se lo tengo en cuenta; es una mujer que está todo el día en su casa, dedicada al cuidado de la misma, de sus tres hijos y de su marido que, para mí, es como un niño más.
Ayer me encontró cuando volvía de comprar un poco de fruta. Me preguntó dónde la compraba yo y me vi contándole que esa noche iba a preparar trozos de frutas variadas, envueltas en chocolate fundido, para mi pareja. A él le encantaba y a mí me encantaba verle disfrutar. Como fuese.
Me dijo que eso era muy exótico y me preguntó si esa noche “teníamos fiesta” (se refería a si tendríamos relaciones sexuales), porque claro ella sólo tenía “los sábados, sabadetes” y eso si no había en la televisión ningún partido de fútbol interesante o una buena película de acción. A su Paco le encantaban Clint Eastwood y Steven Seagal. Siempre era igual, una pura rutina; en eso se convertían todos los matrimonios, “es lo más normal del mundo”, me decía Paca.
No se lo tengo en cuenta; es una mujer que está todo el día en su casa, dedicada al cuidado de la misma, de sus tres hijos y de su marido que, para mí, es como un niño más.
Ayer me encontró cuando volvía de comprar un poco de fruta. Me preguntó dónde la compraba yo y me vi contándole que esa noche iba a preparar trozos de frutas variadas, envueltas en chocolate fundido, para mi pareja. A él le encantaba y a mí me encantaba verle disfrutar. Como fuese.
Me dijo que eso era muy exótico y me preguntó si esa noche “teníamos fiesta” (se refería a si tendríamos relaciones sexuales), porque claro ella sólo tenía “los sábados, sabadetes” y eso si no había en la televisión ningún partido de fútbol interesante o una buena película de acción. A su Paco le encantaban Clint Eastwood y Steven Seagal. Siempre era igual, una pura rutina; en eso se convertían todos los matrimonios, “es lo más normal del mundo”, me decía Paca.
Y yo le dije:
Paca, en mi relación también es todo rutina, pero se trata de que esa rutina no nos amargue. Mira, cuando él llega del trabajo, me besa y me pregunta qué hay de cena. Es una rutina pero muchas noches es él quien en realidad prepara la cena. Luego se va a la ducha, se coloca su albornoz y antes de vestirse, se sienta en su sillón favorito y se toma una cerveza, normalmente sin alcohol. Cuando la termina, pueden suceder dos cosas: que vaya a vestirse y luego charle conmigo, de lo que sea, mientras preparamos juntos la cena, o que aparezca allá donde yo esté, abra su albornoz y me muestre su cuerpo totalmente desnudo. Casi no hace falta decir nada más. Lo demás viene por sí solo. Normalmente, acabo de arrebatarle yo misma el albornoz y empiezo a recorrer todo su cuerpo para acabar donde más le gusta, en lo que ya llevaba erecto al primer contacto de mis labios con su cuello. Otras veces, se quita él el albornoz y me desnuda a mí, y me tumba en el sofá, o me arrincona contra la pared, o me echa sobre el mármol de la cocina, y empieza a saborearme, por todas partes, acabando también donde más me gusta, volviéndome loca. Y eso es así casi todos los días.
Foto cedida por un lector anónimoPaca, en mi relación también es todo rutina, pero se trata de que esa rutina no nos amargue. Mira, cuando él llega del trabajo, me besa y me pregunta qué hay de cena. Es una rutina pero muchas noches es él quien en realidad prepara la cena. Luego se va a la ducha, se coloca su albornoz y antes de vestirse, se sienta en su sillón favorito y se toma una cerveza, normalmente sin alcohol. Cuando la termina, pueden suceder dos cosas: que vaya a vestirse y luego charle conmigo, de lo que sea, mientras preparamos juntos la cena, o que aparezca allá donde yo esté, abra su albornoz y me muestre su cuerpo totalmente desnudo. Casi no hace falta decir nada más. Lo demás viene por sí solo. Normalmente, acabo de arrebatarle yo misma el albornoz y empiezo a recorrer todo su cuerpo para acabar donde más le gusta, en lo que ya llevaba erecto al primer contacto de mis labios con su cuello. Otras veces, se quita él el albornoz y me desnuda a mí, y me tumba en el sofá, o me arrincona contra la pared, o me echa sobre el mármol de la cocina, y empieza a saborearme, por todas partes, acabando también donde más me gusta, volviéndome loca. Y eso es así casi todos los días.
Al cabo de dos días, volví a encontrarme con Paca en la escalera. Venía de comprar.
¿Sabes Belkis? Le conté a mi marido tu historia. Me dijo que era una pavada y yo le dije que, de momento, no pienso follar más sólo los sábados. Y que quiero que cada día, al volver del trabajo, se duche y se ponga su albornoz, mira, éste que le acabo de comprar. Lo va a estrenar hoy, a ver qué pasa, aunque hoy tengo trabajo y tengo que freir el pescado para la cena, y….
Paca era adorable, después de todo. Le dije:
Ssshhh… déjate enharinar, mujer
Ssshhh… déjate enharinar, mujer
Bueno, parece que ese matrimonio va a cambiar una rutina por otra. Pronto descubrirán que las rutinas no tienen por qué ser malas, aunque de vez en cuando, una sorpresa dulce no amarga a nadie. La verdad, me gusta descubrir y estrenar todos los rincones de la casa.
ResponderEliminarHay rutinas dulce, adorables y con mucha miga... jajajaja
ResponderEliminarUhmmm me suelo aburrir de las cosas rutinarias, me gusta renovar y soy inquieta en ese sentido, en mi casa y mi relacion de pareja no existen los sabados sabadetes, ni creo que jamas existan , ese dia si llegase antes preferiria dejar de tener sexo a que se convirtiese en una rutina aburrida, esperar tener sexo programado para mi no tiene ningun aliciente, me encanta cuando mi chico llega y unos dias me da un beso, otros me abraza y me muerde el cuello, otros me simplemente desde la puerta de la cocina me guiña un ojo o me besa el cuello, tampoco le gusta hacer todos los dias lo mismo, afortunadamente los dos somos iguales en ese sentido, el no saber que vas hacer hoy con tu pareja, eso para mi crea su morbo, mi interes, y una ilusion mas al dia, no saber que me hara al llegar a casa me mantiene pendiente de el, me mantiene ilusionada como cuando un niño espera su juguete nuevo
ResponderEliminarbesotes
A nosotros nos encantan las rutinas… algunas rutinas… las nuestras comienzan durante el día, llamados, mensajitos diciendo lo que nos queremos y como deseamos que llegue la noche para estar juntos.
ResponderEliminarA la noche, luego de cenar juntos, generalmente con alguno de nuestros hijos, nos vamos a la cama y allí comienza la fiesta, luego de esperar todo el día ese momento, se cumplen nuestras expectativas, se cumplen las fantasías. Por supuesto que, cada día es distinto, cada etapa es diferente... pero la "rutina" se cumple.
Entonces nos disfrutamos, saboreándonos durante mucho, mucho tiempo… y, luego, a dormir… cansados y satisfechos...
… a veces, la rutina no es tan mala…
Cierto, la rutina es así... aunq hay quien sabe darle una vuelta.
ResponderEliminarShade de Machiavelli, exacto; las rutinas no tienen por qué ser amargas, ni malas ni vacías. Siempre hay cosas que te apetecen hacer rutinariamente. Está bien lo de descubir todos los rincones de la casa, aunque cuidado con cargarse la lavadora. Beso.
ResponderEliminarSsshhh, y cosas que nos encantarían que se convirtiesen en rutina, verdad? Beso.
Adis, es que a la palabra rutina se le ha otorgado un significado de algo aburrido, monótono, algo que no gusta. Pero la rutina sólo es algo que sucede habitualmente, y que sucede siempre.
Lo tuyo, por ejemplo, aunque cambie el modo, es también una rutina; cada día le esperas, le recibes, te corresponde...eso es rutina, porque sucede todos los días. El hacerlo de maneras diferentes salva que la rutina sea monótona, aburrida o despreciable. Te felicito. Beso.
Nosotrosdos, nos hemos entendido a las mil perfecciones. Besos a los dos.
Gudèlu, darle la vuelta a la rutina es algo que hay que currarse. No todo el mundo lo logra. Besos.
Pues las rutinas son rutinas se miren como se miren, y a mí me aburren. Claro que se les puede dar la vuelta, pero entonces ya dejan de ser rutinas, no?
ResponderEliminarUn abrazo, Belkis.
Cam, con lo que te quiero, esta vez no estoy de acuerdo. Hay rutinas que son maravillosas, porque se repiten, y porque nos encanta que se repitan. Sabes que hay rutinas peores. Un abrazo.
ResponderEliminara lo bueno uno se acostumbra fácil...
ResponderEliminarabrazo
f
la foto de ese anonimo con todos mis respetos no es muy erotica
ResponderEliminarespero no se lo tome a mal,tu seguidor pero debo ser sincera, yo he conocido y conozco cuerpos mucho mas eroticos
susana
f, a lo malo cuesta más, pero cuando no hay más remedio, una se acostumbra también. Abrazo.
ResponderEliminarSusana, estoy casi segura de que mi "anónimo erótico" tiene la suficiente madurez para no tomárselo a mal.
ResponderEliminarEl erotismo tiene mil caras. Te diré algo:
Si yo quisiera poner en el blog fotos de cuerpos perfectos, eróticos y erotizantes, las buscaría en la red. Pero a mí eso no me erotiza....o no mucho, la verdad.
Me resulta más erótico, impactante y motivador que gente de a pie muestre una parte de su cuerpo, para ser publicada en un lugar donde alguien (yo, en este caso) le garantiza el más completo de los anonimatos.
Y, una vez aclarado esto, te invito a participar en la galería de imágenes que voluntarios (hasta ahora no hay voluntarias) ofrecen a este lugar.
Saludos
discrepo. a lo malo no hay que acostumbrarse nunca.
ResponderEliminarsi te falta una mano, tendrás que buscar la manera de darle un buen uso a ese muñón. pero no abandonar por no tener mano.
me parece...
quizás tenga una visión demasiado optimista de las cosas.
abrazo
f
belkis, ya que decís que no tenés voluntarias que te hayan enviado fotos, estamos eligiendo alguna linda para mandarte...
ResponderEliminarbesos
nosotrosdos, en realidad tú ya saliste en una foto en el blog, pero sólo se percibía que eras tú.
ResponderEliminarO sea, que ya fuiste voluntaria jejeje.
He recibido vuestras fotos; preciosas, sois....guapísimos!!!!
Encontraré el momento (y algunas palabras de acompañamiento) para publicarlas, y que todo aquel que goce como yo viendo estas imágenes, las disfrute también. Un abrazo a los dos.
susana
ResponderEliminarbelkis, yo tampoco te pido el cuerpo de cristiano ronaldo, pero ese cuerpo me parece antierotico, yo me quedo con el de mi chico que tambien tiene buenas medidas
no me vas a convencer ni yo tampoco pretendo convencerte
saluditos
Susana, en cuanto al sexo y al erotismo, no me veo capacitada para convencer a nadie de nada.
ResponderEliminarSólo intentaba explicarte que a mí me resulta erótico que un desconocido (o no tanto) me preste su imagen o la haga pública, sin entrar en valoraciones de la imagen en sí.
Si tu chico tiene buenas medidas, pues enhorabuena! Saludos
lo de enviar la foto tu querido anonimo yo lo aplaudo, eso me parece encomiable, yo en esto te doy la razon
ResponderEliminaryo entiendo que todas/os envejeceremos pero hay que intentar cuidarse al maximo y mas si tienes pareja y cuando no la tiens tambien
y lo de las medidas cuando una ha tenido la suerte de tener novios con distintas medidas pues se agradece follar con una polla ya tamaño XL, soy un poco picarona :)
bueno me despido del todo
saludos y buena suerte
SUSANA
ufff...lo de enharinar....me recuerda a una peli...uffff
ResponderEliminarsoydecolores, te gusta el pescaito (enharinado) frito?
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