Imagina una primera cita con alguien; todo el mundo las tiene o las ha tenido.
Seas hombre o mujer, estoy segura de que piensas al menos unas horas antes qué te pondrás de ropa, qué perfume usarás, depilarte y/o afeitarte según corresponda. Se vigila extremadamente nuestro aseo personal y nuestra apariencia exterior pues si es una cita, seguro que queremos impresionar y causar buen efecto en la otra persona.
Seas hombre o mujer, estoy segura de que piensas al menos unas horas antes qué te pondrás de ropa, qué perfume usarás, depilarte y/o afeitarte según corresponda. Se vigila extremadamente nuestro aseo personal y nuestra apariencia exterior pues si es una cita, seguro que queremos impresionar y causar buen efecto en la otra persona.
Si esta cita es con alguien a quien no has visto nunca (o al menos no la has tenido delante) ya que la has conocido virtualmente, aquí pueden haber más variantes.
Yo no he tenido demasiadas citas de este tipo, con “hombres virtuales” pero alguna ha habido. Y sí, evidentemente, tuve mi momento de pensar “¿y qué me pongo?”
Yo no he tenido demasiadas citas de este tipo, con “hombres virtuales” pero alguna ha habido. Y sí, evidentemente, tuve mi momento de pensar “¿y qué me pongo?”
Una opción, quizás la más inteligente, sería pensar en ponerme lo mejor posible, lo más guapa y divina que pudiese. Quizás, si causo muy buena impresión, el sujeto en cuestión querrá repetir y que volvamos a vernos como mínimo una segunda vez.
Pero no, no fue ésa mi opción. Porque al final pensé que prefería que el sujeto me viese tal y como soy, como me puede ver cualquiera un día cualquiera. Eso tampoco quiere decir que acudiese a mi cita como un adefesio. Simplemente me limitaba a, como decía mi abuela que en paz descanse, “ir limpia y cosía”. Es decir, bien aseada e impecable. De esta manera, me arriesgaba a que el tipo no quisiese repetir, pero si el tipo repetía…. Sería más que diferente, no?
Pero no, no fue ésa mi opción. Porque al final pensé que prefería que el sujeto me viese tal y como soy, como me puede ver cualquiera un día cualquiera. Eso tampoco quiere decir que acudiese a mi cita como un adefesio. Simplemente me limitaba a, como decía mi abuela que en paz descanse, “ir limpia y cosía”. Es decir, bien aseada e impecable. De esta manera, me arriesgaba a que el tipo no quisiese repetir, pero si el tipo repetía…. Sería más que diferente, no?
Y de esta guisa quedé en algunas ocasiones. En realidad, en casi todas esas ocasiones los dos decidimos casi de mutuo acuerdo no repetir. Sólo hubo uno que repitió y, curiosamente, fue el único que me vió antes (a través de la cam) en mis peores momentos: sin peinar, recién levantada, en pijama y bata de franela, vamos lo más poco exótico y estimulante que podáis imaginar. Pero repitió.
Alguna vez uno de ellos me hizo a mí la pregunta “¿y qué me pongo?”. Y yo le contestaba que fuese él mismo, que no se disfrazase, que acudiese a la cita como podía vestir un día cualquiera.
Sin embargo toda norma tiene su excepción. Y si el propietario de la siguiente foto fuese a acudir a una cita conmigo y me preguntase qué debería ponerse, en este caso mi respuesta sería contundente: ponte lo que quieras pero no olvides tu corbata roja.
Foto cedida
Al propietario de la foto: al final no me quedó claro si querías que se conociese o no tu identidad. Házmelo saber que eso es rápido de corregir.
ResponderEliminarHe puesto mi dirección de blog en la foto (creo que lo haré a partir de ahora en las imágenes que reciba). Más que nada es para preservar de alguna manera la identidad de sus propietarios. Si alguien capta esta imagen en internet, tendrá que venir aquí si quiere saber algo más.
Pero es que además....si tú propietario me lo permites, es que esta foto es mía, para mí!!!!
coincido en lo de presentable.
ResponderEliminarhonestidad.
y por lo general trato de hacer coincidir la afeitada, para no irritar, vió?
salú!
f
ps: eso si, yo "eso", no me lo pongo.
Yo también me decanto por ser yo misma, arreglá pero informal, que si no luego hay que mantener el nivel y si no es el nuestro se hace difícil.
ResponderEliminarMenos mal que aunque la foto sea tuuuuuya la compartes un poquito. Bonita la corbata.
Besos Guapa
f, honesto y presentable. O sea para mí, irresistible. Lo del afeitado, si no raspa mucho, podría soportar (de hecho hay tipos que os queda genial) una barba de varios días. Salú.
ResponderEliminarSsshhh, exacto, totalmente de acuerdo. ¿A que está chula la "corbata", tan bien puesta, tan rosada? jejeje. Besos.
Yo he ido a mis citas a ciegas como soy y de momento con todos he repetido... Ahora bien imagino que con el "deseado" con ese no repetiré por que él no querrá
ResponderEliminarAna, si han repetido por algo será. Así es que ése que no quiere...él se lo pierde! Beso y bienvenida.
ResponderEliminarCon el paso del tiempo he perdido la preocupación que antes tenía con la vestimenta: antes me tomaba muchisimo tiempo combinar colores y estampados, pero supongo que como ya no necesito arreglarme tanto, me dejo estar un poco...
ResponderEliminarNo soy de concertar citas por internet, aunque reconozco una vez que terminamos ligando aunque no había comenzado con esa idea, así que antes de la cita ya nos hemos visto al natural como quien dice.
Y si, es importante no olvidarse los boxers, no sea cosa de agarrarse el amigo con el cierre de la bragueta.
En fin...
Besos!!
No sé por qué pero no me deja comentar con mi cuenta, el de ahi arribita soy yo, Etienne!
ResponderEliminarEtienne, qué grata sorpresa! Yo tampoco suelo concertar citas a través de internet; tan sólo alguna vez con algunas personas que conocí a través de este medio.
ResponderEliminarY sabes? Es una lástima porque iba a proponerte una ;) Besos
Yo más bien te preguntaría: ¿Qué querés que te ponga? Y pensar que uds. se pasan tanto tiempo pensando qué ponerse mientras nosotros nos matamos pensando como desnudarlas.
ResponderEliminarQue desperdicio de energía mental, no?
Ato, tienes razón. Como ya es otoño (al menos acá) y refresca bastante, yo sé que me pondría en primera cita con vós: botas negras con mucho tacón, tanga negro de encaje y una gabardina, no demasiado larga. Es más que nada para ahorrarte trabajo jejeje. Beso.
ResponderEliminarSabes, no me preocupa... quedo y voy con las dos o tres cosa que tengo en el armario. Eso sí, afeitadito y bien aseado jejeje es lo más importante para esa primera cita. Por cierto, no me va el rojo.
ResponderEliminarGudèlu, afeitadito y limpito...no se puede pedir más. ¿No te va el rojo? Supongo que te refieres a la letra roja sobre fondo negro (alguno se ha quejado, y algún informático también). Espero que te refieras sólo a la letra porque a mi cita contigo llevaría ropa interior roja; o quizás sólo una blusa roja...pero el rojo pasión estaría en nuestra cita ;) Besos
ResponderEliminarTe comprendo perfectamente, a mi también me pasa con frecuencia, y siempre tengo la sensación de no haber acertado. Al final tampoco es para tanto.
ResponderEliminarPantuflas Belkis, pantuflas!! Bah, ni hace falta porque ni las botas te voy a sacar, te levanto la gabardina y Let the Games begin!
ResponderEliminarTorrevientos, es que contigo dan más ganas de desvestirse que de vestirse ;) Beso.
ResponderEliminarAto, jajajaja...me encanta tu ímpetu!!!!
Que bueno lo de que no se le olvide la corbata... aunque yo preferiria que no se le olvidara el corbatin!! jajajaja
ResponderEliminarLa verdad es que quede con alguien por primera vez o ya me canse de verla (da igual sean hombres, amigas, lo que sea...) siempre me paso horas pensando que ponerme. Es algo que no puedo evitar.
Hasta para ir a trabajar pienso la noche de antes que me voy a poner, y aun asi hay veces que cuando me levanto cambio de idea... jejeje
Besote.
LunaArdiente, la corbata era una metáfora.
ResponderEliminarPues yo no suelo pensar mucho qué voy a ponerme, improviso en el momento en que tengo que vestirme.
Suelo pasar más horas pensando cómo y cuándo voy a desnudarme.
Besos.
No cielo, lo que no me va es a mí... no me gusta como me queda, en tí supongo que será un placer. En esa 1ª cita o en cualquiera.
ResponderEliminarGudèlu, cielo tú. Un día de éstos, a ver si sufro otro cruce de cables, me hago una foto con algo rojo. Besos.
ResponderEliminarEste comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarBonita corbata! Yo siempre digo...que el valor de la belleza no es de quien la lleva puesta sino de quien la observa hasta el final...
ResponderEliminarun besazo!
..yo me pongo los calzoncillos por fuera...como Superman.
ResponderEliminarLigo la ostia....