Los informáticos me apasionan, son unos artistas de la tecla, suelen tener dedos ágiles, y suelen ser raros, parecer abstraídos a veces en su mundo de códigos y sistema binario, pero cuando bajan al espacio terrenal, son pura maravilla.
Algunos, sin embargo, se creen dioses o semidioses, por dominar un terreno en el que muchos sólo nos embarcamos como meros usuarios, y sin ir más allá de simples funcionalidades. Éstos, para mí, quedan relegados a un segundo, tercer o último plano. No me interesan los dioses en ningún terreno.
Algunos, sin embargo, se creen dioses o semidioses, por dominar un terreno en el que muchos sólo nos embarcamos como meros usuarios, y sin ir más allá de simples funcionalidades. Éstos, para mí, quedan relegados a un segundo, tercer o último plano. No me interesan los dioses en ningún terreno.
En mi trabajo tengo que recurrir de tanto en tanto a ellos. Por conveniencia profesional, por simpatía personal y porque a todos nos conviene, yo me llevo genial con ellos, vienen enseguida que les requiero y suelen solucionarme los problemas que les plantee.
Sin embargo, a veces tengo que pararles los pies. Ellos llegan y te dicen: “mira, esto es muy fácil, haces esto, picas allí, minimizas, entras allí, sales de allá, reseteas,…..” Total: te han echado cincuenta movimientos en el teclado, te han solucionado el problema, pero te has quedado a dos velas sin saber cómo lo han hecho. Y yo necesito saber el cómo, por si me vuelve a suceder.
Y les digo: “mira, esto es como el sexo. Hay que ser prácticos, eficientes, rápidos a veces si la ocasión lo requiere, pero por favor….empieza despacito, suave, con calma…..y déjame que te acompañe en todos los pasos”.
Se ríen –alguno se corta- pero empieza de nuevo, y esta vez lo voy entendiendo, y se culmina con el clímax (la satisfacción) de que logro solucionarlo por mí misma.
Sin embargo, a veces tengo que pararles los pies. Ellos llegan y te dicen: “mira, esto es muy fácil, haces esto, picas allí, minimizas, entras allí, sales de allá, reseteas,…..” Total: te han echado cincuenta movimientos en el teclado, te han solucionado el problema, pero te has quedado a dos velas sin saber cómo lo han hecho. Y yo necesito saber el cómo, por si me vuelve a suceder.
Y les digo: “mira, esto es como el sexo. Hay que ser prácticos, eficientes, rápidos a veces si la ocasión lo requiere, pero por favor….empieza despacito, suave, con calma…..y déjame que te acompañe en todos los pasos”.
Se ríen –alguno se corta- pero empieza de nuevo, y esta vez lo voy entendiendo, y se culmina con el clímax (la satisfacción) de que logro solucionarlo por mí misma.
Me siento mimada por ellos, y ellos saben que es mutuo, aunque a veces es difícil repartir el mimo y las atenciones entre más de 150 compañeros. Me enteré recientemente que fui tema de conversación en su círculo, en sus desayunos; estuvieron debatiendo sobre mi cambio de aspecto físico, y verbalizando cosas que no se atreverían a decirme a la cara. Pero ahora que lo sé, cuando vuelvan a bajar a mi despacho, haré que sus explicaciones sobre procesos sean aún más detenidas, más relajadas.
Hace poco conocí e intimé un poco con otro informático, éste no de mi empresa. Éste me encendió y me apagó varias veces, me ha dejado el disco duro lleno de datos, recuerdos y sensaciones, casi logra cambiar mi sistema operativo, volvía loca todo mi sistema, y al final le dio al ESC(ape) y se largó.
Y hablando de informáticos…..si alguno, o alguien con conocimientos y paciencia está disponible, me gustaría que alguien me echase un cable (con instrucciones claras y precisas), para instalar aquí en el blog un mini-chat. Puede ser sencillo pues en principio sólo lo tendré de prueba una temporada. Si lo logro, luego vendrá lo difícil….que alguien quiera hablar conmigo públicamente, pero ése es un reto que tampoco me corresponde a mí.
Tienes suerte de que los informáticos acudan personalemente a tu llamada. A mi me atienden telefónicamente y de manera virtual. Rara vez solucionan nada...lo único que al final es efectivo: desconectar todo y reiniciar el servidor. Como suele ocurrir en lo personal.
ResponderEliminarBesitos.
Aliana, en mi caso ése es su cometido, o al menos uno de ellos. Desconectar y reiniciar el ordenador es mucho más fácil que en lo personal, eh?
ResponderEliminarMira...justo hoy he recibido la imagen que ahora cuelgo al inicio del post. Un besote.